Otoño.

Y parece que se han cumplido mis deseos. ¡El otoño esta aquí!

Nit de l'art.

Señores, esta noche Palma se viste de arte.

El otoño llega en la madrugada del martes.

Y sí, adoro el verano; los días de calorcito, ponerme morenita al sol,las playas, las calas, las vacaciones en si, comerme un buen helado en la heladería de turno, poder tomarme mi desayuno en la terraza con los primeros rayos de la mañana; disfrutar de mi jardín, de las plantas.

Adoro las gafas de sol, tipo rayban compradas en un bazar cercano; el olor de la cremita solar en la piel; las siestas en las horas mas calurosas; poder ducharme con agua fría; los paseos por la playa y paseos marítimos; que los días sean mas largos y que te permitan hacer mil una cosas; coger la bici y salir a dar una vuelta; las ferias de noche; lo adoro, pero que en septiembre haga mas calor que en el propio agosto cansa. Tengo unas ganas horribles de ponerme una chaquetilla, de esas finitas para que te resguarden de la brisita fría otoñal.

Y puede que luego añore los días calusoros, pero ya vendrán, así que ha día de hoy el otoño es bienvenido y lo espero con ansia.

http://www.diariodemallorca.es/mallorca/2014/09/17/calor-anormal-mes-remitira-lunes/962288.html

http://ultimahora.es/mallorca/noticias/nacional/2014/133407/otono-llegara-madrugada-del-martes-septiembre.html

Foto: Caló des Moro

Como compaginar unos estudios nocturnos.

Ya iniciada la vuelta al cole de los peques y algunos no tan peques, me da por empezar a planear mi rutina diaria.

Cabe decir que en menos de una semana empezaré un grado superior en horario de tarde, lo que me dará vuelta a mi rutina de toda la vida ya que siempre he ido a clase por las mañanas, y ya estoy acostumbrada a ello.

Tengo claro que quiero hacer algo de deporte, tener tiempo de comer tranquila, y de salir para clase con tranquilidad ( y si, odio ir con prisas). Muchas cosas que quiero hacer en un periodo de tiempo que por lo general, estaba en clase.

¿Cómo lo haré ? Aun no lo tengo muy claro, y supongo que al paso de los días lo iré sabiendo, pero para empezar ya tengo una idea de que es lo que voy hacer. Ya acostumbrada años y años a levantarme 6,30-7 ya no hay quien me quite eso de mi reloj biológico, por lo que de 7-8 practicare algo de deporte y ducha, 8-9 desayuno, 9-11 tareas varias( aquí tengo pensado hacer las cosas de clase, aunque aun no se como llegare de cansada de las clases y sí haré o no los mandados por la noche), 11-13.30 tareas varias (esta vez relacionadas con mi casa) + comida, 13.30-14.00 prepararme yo y las cosas para salir de ese día, y a partir de las 14.00 ir saliendo con tranquilidad y coger el bus para ir hasta mi destino teniendo en mente que creo que empezaré las clases a las 15.00, que luego eso ya se verá.

Obviamente esto es una idea general que puede ir variando para acomodarse mejor a los horarios, pero más o menos.

Tengo mil unas ganas de empezar, a pesar de que me da algo de pena que se acaben las vacaciones pero el empezar algo nuevo me emociona.

Espero que sí empezáis algún estudio/trabajo de tarde o noche este plan os sirva, y así podáis haceros una idea.

Martes por la tarde.

Y salir a caminar, en una tarde aburrida sin ningún propósito, pasear pasear, recoger mil y una conchas con la idea de alguna manualidad en tu cabeza.

Y dejar que el agua salada te moje esa herida del pie, de esas sandalias que tanto te gustan pero que te hacen daño, para que así se cure.

Y llevas ese gorro, típico gorro, de algún otro viaje, para que te salve del sol, ese sol que de un intenso te broncea; la mano repleta de conchas, -o como dicen en argentina, caracoles- entre las conchas, algunos que otros granos de arena que se te van acumulando; y sigues caminando, un ratito mas, hasta llegar a esa bandera verde de lejos; y sigues caminando, y mientras caminas en tu búsqueda, te encuentras con acumulaciones de conchas de algún castillo de arena derruido o llevado por el mar, y piensas que te han facilitado el trabajo, pero acabas por no coger ninguna, solo te limitas a mirarlas y dejarlas de largo, porque si no... ¿ que gracia tendría entonces? ; y sigues caminando; y al fin, llegas hasta la bandera verde que ahora ya no es tan lejana, mas bien la tienes ante ti, en su torcido soporte ondeando a la ligera brisa; y das por finalizada la búsqueda de pequeñas conchas, no porque estés cansada, si no porque ya no hay espacio en tu mano para seguir acumulándolas.

Andarías y andarías, estas completamente relajada, ahora, sentada en el murete que separa el paseo de la playa, ves a la gente que va y viene, a sus aires, y te preguntas ¿ cuantos hoy se habrán levantado si ningún plan, y sin propósitos, habrán salido a caminar?
Miles piensas. Y sigues ahí sentada, observando, simplemente disfrutando.

Cosas de la vida.

En lo que llevo de vida,  he sufrido y conocido de otras personas que también,  lo que denomino " esclavos emocionales " , o para que se entienda, perros del hortelano. Y si,  es lo que pensáis,  ese perro que ni comía ni dejaba comer...
Se tratan de relaciones toxicas,  que provocan un desgaste emocional brutal, no permiten un avance personal.

Relaciones de tira y afloja en las que siempre uno de los dos componentes tiene un objetivo diferente,  el de que avance su vida; pero en los perros de hortelano no es permisible,  no hay vez que ambos componentes vayan en una misma dirección.

Ojo, no estoy hablando de manipulaciones,  si no de emociones, emociones de enganche de una persona con otra,  que ya por miedo o por algún otro sentimiento, una de esas personas no avanza...
Y así puede pasar el tiempo,  tal vez mucho tiempo,  tanto que puede que ya ni recuerdes cuando empezó todo,  que ni recuerdes el instante, el momento, o la primera palabra... El caso es que has perdido la cuenta de los días,  no sabes  en que momento se estancó todo, solo recuerdas que algo pasa,  algo en tu vida no avanza. Y decides poner fin,  y piensas que esa vez será la definitiva,  pero eso solo puede salir bien si tu te lo propones y pones empeño en conseguirlo.  Solo así podrás dejar de ser un esclavo emocional.