Vamos a un ritmo tan frenético por la vida que llega un punto que ni nos fijamos de las pequeñas cosas.
Establecimientos, calles, edificios,.. Que están ahí pero que ni las vemos.
De lo que os hablo me di cuenta hace un par de semanas, que la velocidad que la gente lleva les impide ver su alrededor; como en este caso, iba de camino a clase cuando pasé por casualidad por la plaza de las tortugas(cosa rara porque generalmente voy por la acera contraria, pero así lo quiso el destino), y entre semáforo y semáforo ahí estaba, ni tan hecho a posta ni tan de casualidad, una clave de sol con melodía incluida ahí, en el mismo asfalto.
Así que parad un poco,mirad a vuestro alrededor.
No por ir más deprisa llegaremos antes.
Por cierto!
Os presento una nueva sección,
"Mallorca querida ",
sitios, curiosidades y varios de mi isla bonita.

No hay comentarios:
Publicar un comentario